El viernes 9 de marzo, Mati Amaro, Gracia Cabanillas, Conce Rico y Lourdes Mesa, visitaron nuestra biblioteca para contar cuentos a los alumnos de Educación Infantil.
Mati Amaro, abuela de Erik, y natural de Usagre, les contó una leyenda típica de su pueblo, La Cantamora. También recitó una poesía y cantó una jota escritas por su marido José Larrey, que fue dibujante del diario regional Hoy. Al final de este artículo, se reproducen las mismas.
De izquierda a derecha, Graci Cabanillas, Conce Rico, Lourdes Mesa y Mati Amaro.
Alumnos de Educación Infantil con sus tutores y familiares.
Mati Amaro, abuela de Erik, y natural de Usagre, les contó una leyenda típica de su pueblo, La Cantamora. También recitó una poesía y cantó una jota escritas por su marido José Larrey, que fue dibujante del diario regional Hoy. Al final de este artículo, se reproducen las mismas.
Graci Cabanillas, abuela de Tomás, contó el cuento Garbancito, que a ella le contaban cuando era niña.
Conce Rico, abuela de Mercedes y Alicia, contó el cuento Los tres cerditos y recitó una poesía La sirenita, que también reproducimos a continuación.
Lourdes Mesa, madre de Isabel, contó el cuento Pedro y el lobo.
A las cuatro, nuestro agradecimiento por dedicarnos su tiempo y compartir estos momentos entrañables con los más pequeños de nuestro colegio.
JOTA DE LA CANTAMORA LA LEYENDA DE LA CANTAMORA
Baila esa jota, mocita, Dime tú, bella luna febrerina,
jota de la Cantamora si es cierto que en la noche de San Blas
junto a la fuente chiquita cuando tu luz plateada la ilumina
antes que llegue la aurora, se baña una sirena en la Luná.
antes que llegue la aurora
de la noche de San Blas Dime, amiga, si es cierto que aparece
baila esta jota, mocita con sus peines de plata y de marfil
de la Fuente de la Luná. si es verdad que su canto te adormece
Cantamora, sal del agua si su cabello es oro, si nácar su perfil.
en la noche de San Blas
que con peines de oro fino Cuéntame, tú, que le haces compañía
tu pelo yo he de peinar, si todavía le queda alguna pena
tu pelo yo he de peinar si su canción es llanto en noche fría
con roetes de extremeña de reina mora que se encantó en sirena.
sirenita, Cantamora
de la rivera usagreña. Si es voz de encantamora que te atrae
haciéndote gozar las fantasías
de una añeja leyenda que distrae
el velar de las noches, el soñar de los días.
Cuéntame, amiga, que quiero acompañarte
burlando al vigilante toro negro
llegarme hasta su lado con mil artes
acariciar su cuerpo, tocarle su cabello.
JOTA DE LA CANTAMORA LA LEYENDA DE LA CANTAMORA
Baila esa jota, mocita, Dime tú, bella luna febrerina,
jota de la Cantamora si es cierto que en la noche de San Blas
junto a la fuente chiquita cuando tu luz plateada la ilumina
antes que llegue la aurora, se baña una sirena en la Luná.
antes que llegue la aurora
de la noche de San Blas Dime, amiga, si es cierto que aparece
baila esta jota, mocita con sus peines de plata y de marfil
de la Fuente de la Luná. si es verdad que su canto te adormece
Cantamora, sal del agua si su cabello es oro, si nácar su perfil.
en la noche de San Blas
que con peines de oro fino Cuéntame, tú, que le haces compañía
tu pelo yo he de peinar, si todavía le queda alguna pena
tu pelo yo he de peinar si su canción es llanto en noche fría
con roetes de extremeña de reina mora que se encantó en sirena.
sirenita, Cantamora
de la rivera usagreña. Si es voz de encantamora que te atrae
haciéndote gozar las fantasías
de una añeja leyenda que distrae
el velar de las noches, el soñar de los días.
Cuéntame, amiga, que quiero acompañarte
burlando al vigilante toro negro
llegarme hasta su lado con mil artes
acariciar su cuerpo, tocarle su cabello.
Autor: José Larrey
LA SIRENITA
Una sirenita linda
vive en aguas de cristal
tiene colitas de plata
y collares de coral
celebra su cumpleaños,
invita a sus amiguitos
los marineritos peces,
valientes y formalitos.
Es perfecta cocinera
Ha puesto al horno un pastel
que después comerán todos
con un vasito de miel
¡qué rico y qué doradito,
y qué bueno que estará
tres velas por tres añitos
que Sirenita ha cumplido ya.
Un collar de perlas finas
le acaban de regalar,
y un pasador para el pelo
que es una estrella de mar.
Y, entre tantas emociones,
casi se pone a llorar
en pesar que la olvidó
el caballito de mar.
Pero, ya llegó su amigo,
transformado en un arpa
compone bellas canciones
que la sirenita canta.
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